8.2.07

Ubicacion Geografica




Fecha de Fundación: 8 de noviembre de 1870
Fundador:
Capital: Posadas
Superficie: 29.801 Km2
Superficie sobre el total del país: 4 %
Población:906.092 hab. (INDEC/CELADE)
Población Urbana: 51 %
Población Rural: 49 %
Densidad:26,4 % hab/km2
Densidad sobre el total del país: 2,4 %

Límites
Norte: Brasil.
Este: Brasil.
Sur: Brasil.

Oeste:Provincia de Corrientes y Parag

Provincia de la República Argentina que se encuentra en el extremo nororiental del país.
Está rodeada por fronteras internacionales y sólo se une al territorio nacional a través de la provincia de Corrientes por el sur.
Al este y norte limita con Brasil, del cual la separan los ríos Iguazú, San Antonio, Pepirí Guazú y Uruguay, y al oeste con Paraguay, donde el límite está trazado siguiendo el curso del río Paraná.


Departamentos de Misiones

Apóstoles
Cainguas
Candelaria
Capital
Concepción
Eldorado
General Manuel Belgrano
Guaraní
Iguazú

Leandro N. Alem
Libertador General San Martín
Montecarlo
Oberá
San Ignacio
San Javier
San Pedro
25 de Mayo


Limites y Rutas


La Provincia de Misiones se encuentra ubicada entre los paralelos 25º 28' y 28º 10' de latitud sur y los meridianos 53º 38' y 56º 03' de longitud oeste en la Región Nordeste de la República Argentina. Casi la totalidad de sus límites está conformada por rios, el Iguazú al Norte, el Paraná al Oeste, el Pepirí Guazú y el Uruguay al Este y el Chimiray al Sur.
Más del 80% de sus límites son internacionales, lindando al Norte y al Este con La República del Brasil, y al Oeste con la República del Paraguay.
Una pequeña porción de su territorio al sur es limítrofe con la Provincia de Corrientes.
Por su ubicación, forma parte de la región denominada "Corazón de la Cuenca del Plata", por la posición privilegiada en el mapa de la América del Sur. La superficie total es de 29.801 km2 aproximadamente (el 0,8% del total nacional). La mayor parte de su superficie (70%) tienen fuertes pendientes y no son aptas para la agricultura, pero sí para la forestación. La provincia por su ubicación es un eje de circulación de mercaderías y población, tanto nacional como internacional. La provincia se caracteriza por un clima subtropical húmedo. El total de lluvias anuales es de aproximadamente 1.700 mm, y la temperatura media de 20° C.
Se encuentra organizada políticamente en diecisiete departamentos, dividos en 75 municipios.

La Provincia

Posadas, Capital del Paraná

Image
Misiones, comarca privilegiada por la naturaleza y refugio elegido por miles de inmigrantes que Supieron afrontar el desafío que representa su dominio. Misiones es también un destino que ya figura entre las opciones turísticas internacionales. Densas selvas salpicadas de cursos de agua, cuyos torrentes se precipitan al vacío formando una de las cataratas más caudalosas del mundo, la variedad y encanto insuperable de su flora y fauna, las posibilidades de recorrer circuitos de turismo de aventura y de practicar deportes acuáticos, y principalmente el clima subtropical que favorece este prodigio, invita a conocerlo, los doce meses del año.

Misiones también ha sabido convocar desde siempre a pioneros de todas partes del mundo, que llegaron a estas tierras con las valijas cargadas de sueños, esperanzas y de ancestrales tradiciones. Como resultado de esa ininterrumpida migración, encontramos en la provincia un calidoscopio cultural y étnico de incomparable variedad. En el folklore autóctono sobreviven rastros de antiguas culturas europeas y orientales, como latente tributo a su pasado, los usos y costunbres del país de origen sobreviven en las celebraciones típicas, engalanadas con coloridos trajes y perfumadas con los olores de comidas exóticas. Realidad cotidiana fácilmente comprobable en cualquier punto de este territorio, que contiene unas 29 etnias humanas diferentes y celebra esta particularidad en la fiesta nacional del inmigrante que se realiza en la ciudad de Oberá.

Como en ningún otro lugar de la Argentina, la flora y la fauna autóctona se encuentran tan ligada al paisaje, enriqueciendo con su presencia el colorido de su hábitat natural. Una buena muestra de esta combinación la encontramos en el Parque Nacional Iguazú, donde la variedad de las especies, producto del clima subtropical, le han originado la denominación de "Paraíso". Riqueza y abundancia se conjugan en los suelos y en las selvas misioneras, eden de la flora y fauna subtropical entre altísimos árboles e intrincados helechos, alumbrando el nacimiento de delicadas orquídeas y toda clase de plantas exóticas. En el reino animal, los tucanes de multicolores picos, los loros del monte, la agilidad de pumas y yaguaretés y la increible profusión de pájaros, reptiles y monos aportan su cuota de movimiento y armonía. Asombrando a los turistas, cuando ven deslizarse por las pasarelas de las Cataratas del Iguazú a simpáticas iguanas, ya acostumbradas a la curisidad de los visitantes. En tanto, los ríos son habitados por especies icticolas sumamente apreciadas por su tamaño, como el patí, el manguruyú y el dorado, rey indiscutido de la hidrografía local y respetado rival del pescador más avezado.

Misiones: cuna de una interesante cultura nativa que fusionó sus logros con el aporte jesuítico alumbrando un feliz mestizaje. Misiones fue precursora en ciertos aspectos, albergando a la primera imprenta instalada en Sudamérica y a bien surtidas bibliotecas. Siglos más tarde, esa policromía cultural se enriqueció aún más con el caudal inmigratorio, que introdujo en la zona sus respectivas tradiciones. Como resultado hoy en día Misiones es un multifacético mosaico humano donde conviven pacíficamente religiones y culturas de los más diversos orígenes.

IGUAZU


    Iguazú: "El agua grande de los Guaraníes": 275 saltos diseminados en forma de media luna que caen desde 70m. de altura. El límite con las cataratas pasa por la Garganta del Diablo, desfiladero con paredes de agua de unos 150m. de ancho por 700m. de largo, donde se originan múltiples arco iris. Las Cataratas del Iguazú, una de las bellas del planeta, forma parte del Parque Nacional Iguazú.


    Fueron avistadas por Álvar Núñez Cabeza de Vaca en el año 1541 mientras emprendía una alucinante travesía. En ése entonces las bautizó con el nombre de saltos de Santa María. Con el tiempo este nombre cayó en desuso prevaleciendo su nombre indígena, "Iguazú", que en lengua Guaraní significa "Agua Grande".



    Siguiendo el curso del río, las cataratas distan unos 22 Km. de su desembocadura en el río Paraná. En la parte superior a los saltos el río viene formando meandros de ancho variable, presentando además varias islas pequeñas. A partir de la isla San Agustín el río se ensancha a unos 1.500 metros en su mayor parte, formando una amplia "U", que contiene la gran falla que da lugar a un abrupto desnivel en el terreno y, por ende, a las cataratas.


    En su gran curva, una proliferación de escollos, islotes y alargadas islas fragmentan el río en numerosos brazos. Al llegar al barranco, cada uno de ellos da lugar a un salto, cuyo conjunto constituyen el gran abanico de las Cataratas del Iguazú formado por 275 cascadas de diferentes alturas y volúmenes, algunas de inconmensurable belleza.

LAS MISIONES JESUITICAS

    La grandeza de las Misiones Jesuíticas: En la tierra roja de esta región las ruinas misioneras testimonian la grandeza de la obra jesuítica, donde la cultura indígena, se aunó con la europea, sin violencias. Al iniciar la labor de los misioneros en las regiones del Paraná y Guayrá, muy pronto la fundación de pueblos se fue extendiendo a la cuenca del Río Uruguay, y luego al Tape y al Itatin.


    Los indígenas se redujeron en grupos, adoptando junto con las enseñanzas del Evangelio, hábitos de trabajo e ideas de organización social.
    Pero las poblaciones de la región del Guayrá, no pudieron resistir los ataques causados por los mamelucos o bandeirantes (habitantes de San Pablo, actual Brasil) cuyo objeto era aprisionar indígenas y venderlos como esclavos. En solo cuatro años, 1627 - 1631, destruyeron nueve pueblos y se vendieron como esclavos 60.000 indios.




    Esto determinó a Padre Antonio Ruiz de Montoya a organizar el éxodo de los restantes habitantes de esos pueblos.
    Una gran flota de canoas que transportaba por el Río Paraná a más de 12.000 hizo puerto (1631), en medio de incontables penalidades y catástrofes, en las márgenes del arroyo Yabebiry fundándose los pueblos de Loreto y San Ignacio Miní en territorio actualmente argentino.


    A éstos se agregaron otros pueblos que debieron emigrar por el mismo motivo del Tape (1634 - 1636), y del Itatin (1669). De este modo se concentró la gran parte de la actividad misionera a lo largo de las márgenes de los Ríos Paraná y Uruguay, y se consolidaron 30 pueblos organizados con más de 100.000 Guaraníes.
    En la actual provincia de Misiones quedaron ubicados: San Ignacio Miní, Loreto, Santa Ana, Corpus, Candelaria, San José, Apóstoles, Concepción, Santa María la Mayor, Mártires y San Javier. En la actual provincia de Corrientes: San Carlos, Santo Tomé, La Cruz y Yapeyú.


    Plano de la reducción San Ignacio Mini: 2- viviendas indígenas, 3- cabildo, 4- cementerio, 5- iglesia, 8- aulas, 9- comedor, 10- cocina, 11- talleres/depósitos, 14- reloj de sol.


    En el actual Paraguay quedaron establecidos: San Ignacio Guazú, Santa Rosa, Santa María de la Fe, Santiago, San Cosme y Damián, Nuestra Señora de la Encarnación de Itapúa, Trinidad y Jesús.

    En el actual territorio brasileño: Santo Angelo, San Miguel, San Juan Bautista, San Lorenzo, San Luis Gonzaga, San Nicolás y San Borja.
    Se formó así una organización de 30 pueblos con sus yerbales, algodonales y estancias.

Posadas

Posadas es la ciudad cabecera del departamento Capital” de la provincia de Misiones.

División
Este departamento incluye tres municipios:

  • Posadas, con 213.715 habitantes (Censo del 15 de mayo de 1.991),
  • Garupá, 14.337 habitantes,
  • y Fachinal con 385 habitantes.

Aspecto Geográfico

Superficie: 932 Kilómetros cuadrados

Población: 219.096 habitantes, con un crecimiento del 44,6% respecto del censo de 1.980. Representa el 27,7 % de la población provincial. Por sexo: 105.780 varones, y 113.316 mujeres. Índice masculinidad: 93,4%.

Densidad: 235,1 habitantes por km2. Población rural: 2% (la departamental más baja).

Por nacionalidad: 6,5% de extranjeros, algo debajo del índice provincial de 6,93%.

Viviendas: 58.256 (1.1991). Promedio de habitantes por vivienda: 3,96.

Origen del nombre: El departamento figura con el nombre de Capital a partir de la división administrativa de 1.895. Posadas fue Capital desde su incorporación a Misiones, (cedida el área por la provincia de Corrientes) el 30 de julio de 1.884, denominándose entonces con el mismo nombre, Posadas.
Se llamó así desde el 22 de Septiembre de 1.884, cuando la legislatura de Corrientes dispuso llamar Posadas al pueblo Trincheras de San José.
Antiguamente fue capital de la antigua provincia Jesuítica de Misiones el pueblo de Candelaria, y en 1.882 fue también capital el pueblo de Corpus, con el nombre de Ciudad de San Martín.

Límites: - Al Norte el río Paraná, que lo separa de la República del Paraguay.

  • Al Este el arroyo Garupá y una línea convencional que linda con el departamento de Candelaria.
  • Al Sudeste una línea convencional lo divide de Leandro N.Alem.
  • Al Sudeste y Sur por líneas quebradas con Apóstoles.
  • Al Oeste por el arroyo Itaembé y una línea recta convencional con la provincia de Corrientes.

Producciones e Industrias: El departamento Capital registra una extensión de 21.758 hectáreas sin uso, 3.745 para ganadería, y a otros usos se destinan 4.921 has.
  • Yerba Mate: 1.230 has. y una producción de 1.108 toneladas de yerba canchada.
  • Té: 106 has.
  • Tung: 100 has.
  • Cítricos: 22 has.
  • Soja: 3.577 has.
  • Tabaco: 25 has.
  • Mandioca: 60 has.
  • Otros cultivos: 423 has.
  • Forestaciones: 2.252 has.
  • Ganadería: 30.000 vacunos, 1.265 porcinos, 3.078 equinos, 1.321 ovinos (es la mayor existencia en la provincia)
Otras industrias departamentales son las Rocas de Aplicación (canteras), Aserraderos, Fábricas de Láminas y Terciados, Mueblerías, Molinos de Yerba Mate, Fábricas de Alcoholes, Plantas de jugos cítricos, Fábricas de ladrillos, Estructuras Metálicas, Cerámicas, Fábricas de ropa de trabajo, etc.

Economía: el departamento participa con varios porcentajes del Producto Bruto Interno de Misiones, en general representativos del total, como los servicios personales, viviendas y finanzas, servicios públicos y de gobierno.

Comercio: Hay censados ( 1.985) 4.533 establecimientos comerciales. El parque automotor en 1.991 anota 2.118 camiones, una cuarta parte del total provincial.

Centros poblados: sin dudas, Posadas es la ciudad más importante del departamento, se alza sobre una de las más pronunciadas curvas del Río Paraná, la más hermosa, como el comienzo de una extensa “bahía”, y aquella atalaya se divisa desde muy lejos y de distintas direcciones en el acceso fluvial.

Cronología de la Ciudad de Posadas

Anunciación de Itapuá:
En la ribera izquierda del río Paraná, al occidente del puerto viejo de la ciudad de Posadas, frente al término de la calle Bajada Vieja, no ha muchos años atrás, se erguía un monolito geológico de unos dos metros de altura, con una piedra asentada en el extremo, de más de sesenta centímetros de alto, coronada con una arista romana, sesgada de Este a Noroeste, en dirección a la corriente de río, con lados curvos hasta la mitad de esa segunda piedra pulidos por la inclemencia del tiempo y las aguas.
Antes de la construcción del nuevo puerto, fue derribada esa piedra descripta y después de inaugurado el mismo, fue tumbado el monumento geológico, que los guaraníes lo denominaron Itapuá.
El 25 de marzo de 1.615, el Padre Roque González con la ayuda de gran cacique Itapuá y cuatro caciques menores comarcados, fundó entre este monolito y la laguna, que era el puerto, la reducción de indios guaraníes de Nuestra Señora de la Anunciación de Itapuá. Por las pestes de la época, el Padre fundador la trasladó al otro lado de la orilla del río. El 25 de marzo de 1.625, la refunda con el nombre de Nuestra Señora de Encarnación, en el sitio que hoy ocupa la ciudad de Encarnación en el Paraguay.
Nombres Posteriores
En 1.629, el Provincial de la Provincia Jesuítica del Paraguay, padre Francisco Vázquez Trujillo, le dio el nombre de Puerto Santa Cruz. En 1.628, la reducción de San José del Tapé, huyendo de los bandeirantes, se estableció en las cercanías de la laguna de Itapuá con el nombre de San José de la Rinconada; en 1.660 se trasladó al interior. El puerto de Santa Cruz, después puerto de San José, quedó con el nombre de Paso San José; la laguna de Itapuá con el de Laguna de San José y los campos de pastoreo sobre el río Paraná, hasta Trinchera de Loreto, cerca de Ituzaingó, Corrientes, con los nombres de Rinconada de San José, Garganta y Tranquera de San José.
Trinchera de San José
En 1.838, el Supremo Dictador del Paraguay, Dr.J.Gaspar de Francia, por razones políticas, comerciales y defensivas, mandó construir una muralla de piedra, en línea quebrada, en las cercanías del Paso San José, desde el encajonamiento del arroyo Patotí, afluente del Paraná, hacia el SE, a los bañados de la altura de la horqueta del arroyo Soró, tributario de la Laguna San José, que desagua en el Paraná. A este recinto amurallado le dieron el nombre de Trinchera de San José, posteriormente denominada Trinchera de Itapuá y Trinchera de los Paraguayos.
En 1.867, los vivanderos, comerciantes y proveedores del Segundo Ejército Brasileño de la Triple Alianza se establecieron en el recinto de esta muralla. Fue el comienzo del pueblo Trinchera de San José. El 1º de abril de 1.871, el Poder Ejecutivo de Corrientes, en atención al pedido de los vecinos efectuado en 1.869 y del juez de paz a principios de 1.871, contrató con el agrimensor Francisco Lezcano la mensura y amojonamiento del área Trinchera de San José, reservada por Ley en 1.870. El agrimensor comenzó la mensura el 6 de mayo de 1.871 y la concluyó el 29 del mismo mes y año.
Posadas
El diputado por los departamentos de Santo Tomé y Candelaria, Carlos Abalos presentó a la Cámara Legislativa correntina un proyecto cambiando el nombre del pueblo de Trinchera de San José por el de Belgrano, proyecto que fue debatido por el mayor interés y al final fue sancionado dando el nombre de Posadas, promulgado el 17 de septiembre de 1.879.
Posadas, Capital de Misiones
El 22 de diciembre de 1.881, el Poder Ejecutivo de la Nación promulgó la ley de federalización de Misiones, separándola de la Provincia de Corrientes. El 11º de enero de 1.882 fue nombrado gobernador del Territorio Nacional de Misiones el coronel Rudencindo Roca y designado capital del Territorio el pueblo de Corpus con el nombre de “Ciudad de San Martín”. El gobernador Roca residió en Posadas y no en Corpus, aislado entonces por la falta de puentes y caminos, circunstancias que lo alentaron a solicitar por intermedio del Ministerio del Interior al Presidente de la Nación, al Gobierno de Corrientes, la cesión del pueblo de Posadas y sus ejidos para levantar una gran capital argentina. El 22 de agosto de 1.882 el Poder Ejecutivo de Corrientes promulgó la correspondiente ley, haciendo la cesión solicitada y fijando los nuevos límites con Misiones. Por la ley de la Nación Nº1437 del 30 de julio de 1.884 fue aceptada e incorporada esta cesión al Territorio Nacional de Misiones y declarada su capital el pueblo de Posadas.
El gobernador Roca, por su acción oficial y personal, prohibió el uso de los nombres de Trinchera de San José, Trinchera y San José.

Museo Arqueológico e Histórico "Andrés Guacurarí

Uno de los lugares atractivos de Posadas por su pasado histórico, es el Museo Arqueológico e Histórico "Andrés Guacurarí", que ofrece a quién lo visita, materiales de gran valor histórico y cultural. El recinto alberga objetos del período paleolítico de nuestra provincia y de la época jesuítica predominante, así como los objetos de otras épocas que ayudan a la interpretación de nuestra cultura.
Los materiales históricos de la provincia se exhiben en forma permanente en los distintos sectores del museo y en vitrinas, con sus respectivas indicaciones, que orientan al visitante hacia una mayor compresión de los objetos expuestos.
Un nombre con historia
El primer nombre impuesto a este ámbito donde se conserva y se revive el ayer de Misiones, fue "Museo del Hombre", creado en 1978 merced a las colecciones donadas por Miguel Angel Nadasdy, de nacionalidad rumana, radicado hasta su muerte en la localidad de San Ignacio, que dedicó la mayor parte de su vida a conservar elementos representativos de culturas europeas, de nuestro país, y especialmente de Misiones. Años después, este reservorio se denominó "Andrés Guacurarí", en memoria del indígena misionero nacido en la reducción de San Francisco de Borja (hoy Brasil) el 30 de noviembre de 1775, que fue adoptado por el caudillo oriental José Gervasio Artigas y se convirtió después en uno de los principales jefes de Artigas. Fue gobernador de Misiones en 1915. Dedicó su vida a luchar por la causa del federalismo y las autonomías provinciales y defender los límites territoriales de nuestra patria contra los intereses expansionistas de otros países.
Sala jesuítico-guaraní
Este ámbito, donde el pasado y el presente se conjugan, cuenta con un centro de interpretación jesuítico-guaraní, conformado por trabajos de investigación constante y continua, con el aporte de los estudiosos e interesados en la materia específica, que se difunde en forma gráfica, fotográfica, visual y auditiva. Se aprecia a través de cuadros sobre aspectos edilicios y constructivos de las misiones, elementos originales y maquetas que muestran la traza de las reducciones y las disposiciones de los edificios; ruta jesuítica internacional, interior de una vivienda, por medio de réplicas que recrean lo que fue un hogar indígena en las reducciones. También se exponen grabados y el catecismo en lengua guaraní compuesto en 1724, por Nicolás Yapuguay, en la imprenta de Santa María la Mayor. Otras vitrinas contienen colecciones correspondientes a los períodos paleolítico y neolítico, fruto del relevamiento arqueológico. Los elementos fueron hallados por medio de excavaciones sistemáticas de campo en San Javier, Monte Carlo, Puerto Piray, Capioví, Pueto Iguazú. Se trata un sinnúmero de hachas, puntas de lanza, fragmentos cerámicos y ánforas funerarias. Los trabajos de selección, clasificación con relación al tiempo y cultura fueron realizados por la arqueóloga Ruth Adela Poujade.
Esculturas religiosas
En otro sector se exponen imágenes religiosas, construidas en madera policromada y articuladas que se hallan expuestas en las distintas vitrinas, que fueron donadas por el citado coleccionista. Todas estas esculturas pertenecieron a distintos dueños, y Nadasdy, en su búsqueda por diversos lugares de la provincia, obtuvo conjeando piezas jesuíticas por alimentos. En las Misiones Jesuíticas, la escultura fue una importante actividad, como auxiliar de la arquitectura o como arte imaginero. Las iglesias jesuíticas se poblaron de imágenes de madera generalmente policromadas o bien de imágenes articuladas para ser vestidas. Varias de ellas se hallan expuestas en la sala mayor de la planta alta del museo histórico.
Artesanía guaraní
En otro sector se exhiben canastos de diversos tamaños, elaborados por aborígenes con fibras vegetales autóctonas, especialmente de gran variedad de cañas típicas de la zona

La Catedral de Posadas

El origen de nuestra Catedral podríamos remontarlo al 25 de marzo de 1.615, cuando el padre Roque González de Santa Cruz funda la "Reducción de Nuestra Señora de la Anunciación de Itapúa", clava la cruz del cristianismo, junto a ella precarias viviendas, comienza a predicar el Evangelio y la conquista espiritual de los aborígenes, tarea que le fue difícil, ya que los dueños de estas tierras atacaban los asentamientos. La Reducción es trasladada años más tarde a la orilla opuesta de río, hoy Encarnación; en 1.628 quedaban pocas familias en las cercanías del Puerto o Rinconada por donde se realizaba el comercio de productos con destino a Buenos Aires y Brasil.
Cuando las Reducciones habían alcanzado un total esplendor, los jesuítas fueron expulsados en 1.767, y los pueblos paulatinamente fueron decayendo; años más tarde, para evitar ataques y saqueos a la población y puerto de Itapúa, Rodríguez de Francia que ejercía el gobierno en Paraguay, hace construir, en 1.833, una muralla de piedra a la que llamó "Trinchera de los Paraguayos", luego "Trincheras de Itapúa".
A principios de 1.867 el Batallón 24 se establece en este lugar y su capellán edifica una capilla en honor al Patriarca San José; desde ese momento el pueblo empieza a llamarse "Trincheras de San José".
El 13 de octubre de 1.872 el gobierno de Corrientes, del cual dependía este pueblo, convoca a elecciones para constituir las autoridades municipales, las que asumen el 18 del mismo mes. La corporación municipal de Trincheras de San José, entre las primeras medidas tomadas, resuelve dotar al pueblo de un templo, para ello convoca a vecinos y autoridades, en el Juzgado de Paz, el 5 de marzo de 1.873, con el fin de recaudar fondos y llevar a cabo esta iniciativa. En julio del 1.874 se solicitaal ministro eclesiástico de Corrientes autorización y en agosto se envía el plano presentado por Juan Irigoyen, quedando una copia en la Municipalidad, el cual fue aprobado.
El padre Vicente Buffardi, cura y ex curador de las Misiones del Paraguay, solicita el viacario de Corrientes desempeñarse como cura de Trincheras de San José, pero su pedido fue denegado, a pesar de que era él quien cruzaba el río Paraná y realizaba bautismos, casamientos y asistencia espiritual a los vecinos.
Con fecha del 24 de febrero de 1.875, según nota del delegado eclesiástico, se anuncia el nombramiento del sacerdote José Motta como cura del pueblo, quien se hace cargo en abril de ese año. Se alquiló una casa que servía para los oficios religiosos, vivienda del párroco y escuela pública.
Nuevamente se crea una comisión protemplo el 23 de junio de 1.875, que se reunía en el local de la Municipalidad. Al año siguiente, 5 de enero de 1.876, por la suma de tres mil pesos fuertes se resolvió la construcción del templo, bajo los patronatos de San José y Nuestra Señora de la Candelaria, se colocó la piedra fundamental en el lugar que actualmente está emplazada, el 16 de enero de 1.876, siendo padrino de la ceremonia don Antonio Fragueiro. En agosto de ese año se delimita el terreno situado al norte de la plaza 9 de Julio, que debía medir 45 varas de Este a Oeste y 50 varas de Norte a Sur. Después de varios meses de intensos trabajos se concluye la obra que es inaugurada el primer domingo de diciembre de 1.876, siendo presidente de la Corporación Municipal don Alfonso de Arrechea (padre). El pueblo concurrió masivamente a esta fiesta de la fe cristiana.
A principios de 1.880 una tormenta derrumba una de las torres, el templo es reparado con algunas modificaciones, quedando terminado en 1.881.
El padre Federico Worgt recibe el templo en 1.898; este visionario párroco sugiere levantar una nueva iglesia, después de varias gestiones el gobernador Juan José Lanusse le otorga, en 1.904, una subvención y comienza la edificación del nuevo templo, trabajo realizado en forma gratuita por el constructor Juan Becker. Los planos eran del estilo romano-antiguo, para no interrumpir los oficios religiosos dejan en pie la nave central, se construyeron las naves laterales, se levantaron las torres hasta la altura del techo principal, un parapeto entre ambas y la bóveda de la nave central.
Al celebrarse el centenario de la Revolución de Mayo, la Comisión de Festejos del Centenario donó un reloj que fue colocado en la torre de la Iglesia. El altar del Sagrado Corazón lo donó Lázaro Gibaja; el púlpito y cielorraso de la bóveda, la firma Núñez y Gibaja.
El padre Federico Rademacher se hace cargo del templo en 1.913 y se dedica a completar los detalles que aún estaban sin terminar.
Se constituye en 1.914 una comisión de feligreses para construir en Posadas una Iglesia matríz acorde a su crecimiento demográfico, siendo párroco el padre Gerardo Woeste; el añó 1.934 surge la idea de llevar a cabo una refacción importante en la Catedral; el arquitecto Alajandro Bustillo presenta un plano, el cual fue aprobado; años después se comienza al trabajo, se modifica el frente, se construyen las dos torres, pero como quedaron desproporcionadas con relación a la dimensión del edificio, resuelven darles mayor altura, primero elevan una torre y años más tarde ( 1.944 - 1.945 ) la otra.
Esta obra se terminó en 1.937 bajo la dirección del arquitecto Antonio Von Liebe, la realizó el constructor Emilio Fogeler y era párroco el reverendo Pablo Stenke, quien fue el que inició el trabajo.
La Catedral de Posadas tiene alineamientos de la arquitectura romántica, tanto francesa como italiana; la fachada de vanos altos y angostos terminan en arcos de medio punto de variadas dimensiones y una escenografía planiforme, sobria. Las torres con sus trabajados capiteles terminan en cruces de hierros. El aspecto del templo es basilical, su nave central y las dos laterales reflejan la misma simplicidad usada en su exterior.
El altar mayor era de madera labrada donde estaban asentadas figuras de santos, vírgenes, candelabros de bronce y floreros de cristal; la parte superior terminada con guirnaldas de luces. El púlpito de madera labrada y de forma poligonal tenía en cada cara bajorrelieves representando a los doce Apóstoles y en la parte superior, la representación de San Roque. En la bóveda del altar mayor pintado en bellos colores la representación del Espíritu Santo que daba mangnificencia al templo, y en los altares laterales San José y el Sagrado Corazón.
Después del II Concilio Ecuménico de 1.964 se resuelve adoptar las dicisiones tomadas en Roma, se retiran el altar mayor, el púlpito, las estatuas de vírgenes y santos, quedando el recinto sagrado con la simplicidad que hoy ostenta. En la actualidad se realizaron trabajos de refacción y pintura, realzando el estilo arquitectónico de la Catedral de Posadas.

"La estación del Ferrocarril "

La estación Posadas del Ferrocarril "General Justo José de Urquiza" está estrechamente relacionada con la particular manera en que se desarrolló la historia colectiva de Misiones.
Además, como patrimonio arquitectónico en uso hasta hace poco tiempo, fue incorporado en su calidad edificada, un mundo de significaciones que con el desarrollo de los años la sociedad le fue donado.
El estilo arquitectónico, signado por una adustez y pragmatismo en la resolución de sus formas, determina la impronta constructiva inglesa, propia de la mayoria de las estaciones construidas por empresas anglosajonas, en nuestro país.
Tendido de Vías
El tendido de las vías férreas, a cargo de la Compañia de Juan Clark, se ejecutó en tramos, cumpliéndose la primera parte de Monte Caseros hasta Santo Tomé (1902); prosiguiendo la tarea hasta concretarse la instalación de estación Apóstoles (1910). El ramal Posadas finaliza el 27 de diciembre de 1912, con la construcción del edificio de la estación.

En el caso de la estación de Posadas se construyó de primera categoría especial, por su movimiento de pasajeros, carácter de cabecera y el hecho de ser terminal del recorrido en Misiones.
El diseño de la central misionera estuvo a cargo del arquitecto Arturo Gancedo Castrillo y la construcción de la misma se hizo por contrato con la empresa Vedetti Hermanos, la cual también llevó a cabo las obras del atrancadero de los ferrys boats.
Paralelamente a la finalización de la estación, se inició la obra del ferry boat, cuyo servicio se habilitó el 19 de octubre de 1913, permitiendo el tráfico entre la estación Posadas y Encarnación, conectando el Ferrocarril del Nordeste Argentino con el Central de Paraguay, el cual fue también construido por la compañis anglo-chilena Clark.

Ubicación en el contexto urbano
La Dirección General de Patrimonio y Sitios Históricos de la Secretaría de Estado de Cultura sostiene que la estación de trenes es paradigma del sitio urbano en el cual se halla ubicada; iniciándose en la plazoleta de Córdoba y Roque Sáenz Peña y se completa en un contexto arquitectónico singular, definiendo un sector de vistosa armonía entre la funcionalidad del conjunto y una modalidad de ocupación del espacio social posadeño.
La ubicación de los edificios y su diálogo con el entorno plantea que no solamente su uso estuvo determinado por el hecho de ser terminal ferroviaria, sino que se constituyó en un vértice de la vida social, como también se puede decir de la Bajada Vieja e el Cerro Pelón; conjuntamente con los cuales recorta una geografía ciudadana sumamente atractiva, propia de fines del siglo XIX y principios del XX.

Edificio Central
El edificio central resguarda el estilo en su techura a dos aguas, en el trabajo ascéticamente artesanal de sus formas externas, en su configuración espacial interna. Se incorporan objetos identificatorios del concepto arquitectónico matriz, como la chimenea con estufa, la sala de espera y las oficinas. A ello se adicionan las galerías que componen el andén próximo a las vías.
Esta edificación principal de la estación se equilibra en un todo homogéneo, con los depósitos, talleres y tanque de agua.
Su estructura en término constructivos responde al a tradición funcional inglesa, con la predominancia del uso de la madera y el metal.
A ello se le suman las formas de su fachada, cuyo elemento determinante es el ladrillo a la vista. Este conjunto arquitectónico explica, en su permanencia estoica, la modalidad singular de ocupar el espacio y cómo impacta la misma en su contexto inmediato, dandocomo consecuencia una identidad característica y diferente aql lugar, especialmente en el crecimiento poblacional en derredor de la estación.

Valor Fundamental
Su valor fundamental, además de técnico-arquitectónico, está dado por su función de parte insustituible de un medio de transporte que comunicó el territorio misionero con el país y la región.
Fue el lugar de encuentro y despedidas, de llantos y alegrías. En resumen, fue el soporte de comunicación entre los pueblos; que hoy la continuidad tramposa pretende ignorar, pero que inclaudicablemente está presente como disparador de la memoria, de los recuerdos, de la nostalgia de los habitantes de esta tierra misionera.

FLORA y FAUNA


Flora

La formación selvática se presenta densa y muy diversificada en especies cuyas alturas variables determinan los diferentes estratos de vegetación enmarañada con enredaderas, trepadoras y epífitas.
Los bosques y montes naturales ocupan casi la mitad de su superficie y se encuentran muy alterados en sus condiciones originales por la tala selectiva o el uso agrícola.
La riqueza florística de la Selva Misionera sorprende hasta al lego en la materia.
Se conocen unas 2000 especies de plantas vasculares, entre las que se hallan unas 90 clases de árboles de gran porte, y alrededor de 150 especies arbóreas menores y arbustivas.
Por definición, una selva está compuesta por numerosos estratos de vegetación, cada uno caracterizado por un grupo particular de especies, tanto animales como vegetales.
El llamado dosel o techo de la selva está situado entre los 10 y 20 m. de altura, y lo conforman especies arbóreas de gran porte como el guatambú blanco, el laurel negro y la cancharana.
Los acompañan dos palmeras: la pindó y el palmito, junto al aguay, el laurel amarillo y el peteribí.
Superando esta densa capa se encuentra el estrato de los emergentes, los gigantes de la selva, formado por el palo rosa , el incienso, el ibirá-pitá, el rabo molle, el alecrín y el timbó.
El estrato intermedio está constituido por todos los renovales de las especie mencionadas, por árboles de menor porte, y por los llamativos helechos arborescentes, vestigios vivientes de épocas prehistóricas.
Por debajo de este estrato hallaremos el arbustivo, dominado entre otras numerosas especies, por las bambúseas, parientes de la caña bambú como la gigantesca caña tacuaruzú, las menores como la yatevó y tacuapí y la trepadora tacuarembó.
Estas especies forman frecuentemente cañaverales impenetrables.
El estrato herbáceo, está compuesto principalmente por gramíneas, pastos y se encuentra tapizado por materia orgánica en descomposición, sobre la cual proliferan infinidad de líquenes, musgos y hongos, esta microcomunidad forma el llamado estrato muscinal.
Una enorme variedad de plantas que se aferran a troncos y ramas constituyen el estrato de las epífitas.
Finalmente, y conectando esta multitud vegetal se encuentran las lianas y enredaderas que vegetan sobre las ramas de los árboles más altos y descienden con sus raíces hasta el suelo selvático.
Hallaremos también una pequeña muestra del Distrito de las Selvas Mixtas, representado por las comunidades de laurel negro, guatambú blanco y pino.
Esta última especie forma el estrato arbóreo superior en forma dominante.
Otro vegetal frecuente en estas selvas es la yerba mate, que en su estado natural crece con el porte de un árbol, que llega a tener unos 15 m. de altura.
Es más frecuente, sin duda ver a esta planta cultivada, donde no sobrepasa el tamaño de un pequeño arbusto.
Acompañan al pino árboles como el marmelero, vasouriña, guariroba, maría preta, entre muchos otros que forman el estrato arbóreo de media altura.
En el estrato arbustivo llaman la atención los hermosos helechos arborescentes, que pueden llegar a los 4 metros de altura.
Es dable observar en esta selva virgen la característica florística que la distingue del bosque, el sotobosque o estrato inferior.
Es un recurso natural de gran importancia económica, pues de ella provienen las maderas para mueblería y ebanistería, guatambú, para la carpintería naval, incienso y timbó, esencias y extractos para perfumería, y hasta frutos comestibles, palmitos.


Fauna
Son pocas las provincias que pueden ofrecer una fauna silvestre tan abundante y variada como la misionera.
En cuanto a los mamíferos, la mayoría son de pequeño y mediano porte, como el gato tigre, la corzuela roja, el mono caí, la paca, y una gran variedad de roedores.
La variedad de animales presentes está íntimamente relacionada con la diversidad ambiental.
Las aves resulta el grupo más numeroso dentro de los vertebrados.
Se comprobó la presencia del coludito de los pinos, pequeña ave que se encuentra asociada a los bosques naturales de pino paraná perdices, martinetas, garzas, flamencos, patos, teros, palomas, loros, catas, carpinteros, horneros, golondrinas, urracas, cardenales, etc.
Tengamos en cuenta que en la provincia de Misiones se han registrado unas 500 especies y en la Argentina unas 1000, cifras que evidencian la enorme biodiversidad que sostiene este ecosistema.
Existe todo un grupo de especies de hábitos especialmente terrícolas, con poca capacidad de vuelo, que recorren el suelo de la selva.
Ejemplo de ello son los inuambúes, el mayor de los cuales es el macuco.
En el dosel selvático, en cambio, se mueven aves principalmente frugívoras, como los tucanes toco o grande, rojo y amarillo, arasaríes y una enorme variedad de pequeñas aves multicolores como los tangaráes y fruteros.
Por encima del techo vegetal las grandes rapaces como el águila harpía, águila monera, y las águilas crestudas utilizan como atalayas las gigantescas copas de los árboles emergentes, vigilando los movimientos de monos y otras especies arborícolas que constituyen su alimento.
Otra gran variedad de especies de hábitos acuáticos ocupan los innumerables riachos y el mismo río iguazú.
En todos los estratos selváticos están presentes los anfibios, los reptiles, culebras y víboras.
Se destaca el yacaré overo, que suele ser visto asoleándose sobre las costas barrrosas, a veces junto a tortugas de río, entre las víboras se destacan la coral verdadera y la muy venenos a yararácuzú boas, lagartos, tortugas, sapos, escuerzos, ranas, e insectos, se hallan muy bien representados.
Muchas especies de mamíferos están adaptados a condiciones semiacuáticas de vida.
Ejemplo de esto es la curiosa cuica de agua, de la familia de las comadrejas, el lobito de río y el ya escasísimo lobo gargantilla.
Esta última especie, que llega a tener 2 m. de longitud, es conocido también con los nombres de lobo grande, ariranha en Brasil y nutria gigante del amazonas, ya que en esa región de Sudamérica aún es abundante.
Entre los vertebrados de tierra firme figuran el tapir o anta, el oso hormiguero grande, las corzuelas, de las cuales hallamos dos especies: la enana y la colorada, el pecarí labiado, la paca y el agutí.
Un grupo particularmente diverso es el de los carnívoros, liderado por el de mayor porte: el yaguareté o tigre americano, que está acompañado por el puma, el ocelote, el gato montés los gatos menores como el chiví, margay y yaguarundí, el hurón mayor, el mayuato, el perro o zorro vinagre, zorros, zorrinos, murciélagos, comadrejas, y ardilla gris misionera.
Las especies de hábitos arborícolas forman otro grupo aparte, como el oso melero o tamanduá, el coatí, el coendú, y el mono caí.
La fauna ictícola es de una gran riqueza destacándose el surubí y el dorado uno de los ejemplares más perseguidos por la pesca deportiva.
El grupo de los peces está también muy diversificado.
Se encuentran bien diferenciados en dos grupos: los que habitan aguas arriba de las cataratas y los de aguas abajo.
Esa formidable barrera natural ha permitido la diferenciación de especies exclusivas del curso superior del río Iguazú, ya que hasta allí no llegan los grandes peces carnívoros del Paraná, como el Dorado.
El elenco faunístico se completa con una cantidad aún no determinada de insectos.
Miles de especies pueblan los ríos, la selva y el suelo.
La familia más vistosa es sin duda la de las mariposas; algunas sorprenden al visitante por su tamaño, otras por su gran variedad de colores y formas.

LA SELVA MISIONERA
Informacion suministrada por www.enelcamino.com.ar
Las dos formaciones de selva subtropical con que cuenta la Argentina tienen la cualidad de reunir la mayor biodiversidad de nuestro territorio. De las dos, la selva austrobrasileña —la otra es la tucumano-oranense, que ingresa desde Bolivia y se extiende hasta el este de Catamarca— es la que ocupaba gran parte de la provincia de Misiones y que hoy se encuentra confinada en reservas provinciales y en el Parque Nacional Iguazú, constituyendo la otra gran maravilla turística de la región. Antes de salir a caminar por un sendero, conviene conocer algunas características de la selva misionera. Por ejemplo, que la comunidad vegetal exhibe cuatro estratos definidos: el de los gigantes o emergentes, árboles mayo-res de 30 metros de altura en realidad, pueden superar los 50 metros—; el alto, de 20 a 30 metros de altura; el medio, entre 10 y 20 metros; y el bajo, con árboles de 10 metros o menos. Asimismo, si miramos hacia el piso descubriremos también estratos de bambúceas, uno arbustivo, uno herbáceo y uno de muscina L. Sin embargo, contra lo que podría suponerse, los suelos no son tan fértiles. En efecto, si bien la productividad primaria deja un abundante residuo de hojas, la excesiva acidificación dificulta los procesos bacterianos y determina la escasez de humus.
Si a ello le agregamos un régimen torrencial de precipitaciones y una tala abusiva, veremos que los suelos quedan expuestos a un proceso de erosión que resulta devastador para la selva. De este modo sus moradores más grandes —el yaguareté, el puma, el gato tinca, el zorro gris, el paca, el coatí, el oso hormiguero y el tapir— corren el riesgo de desaparecer, al igual que las 400 especies de aves y los millones de insectos, como las mariposas, que estallan en mil colores cada primavera. Respecto del clima en la selva, dada su posición latitudinal y la altura sobre el nivel del mar es menos caluroso que el de otras selvas del planeta. Así, aun cuando se hayan producido temperaturas máximas superiores a los 40* C en enero, durante la noche desciende varios grados. Contribuye a esa moderación térmica la exuberante vegetación.
Si estudiamos un poco la selva que rodea los senderos, advertiremos la presencia de las plantas epífitas mencionadas, que se desarrollan en las copas, ramas y troncos de los árboles, dejando caer sus raíces aéreas de varios metros de longitud.
Las más interesantes son las orquídeas —en la selva las hay de los colores y tamaños más diversos—, pero encontraremos también el guaimbé, una arácea de gran tamaño cuyas raíces se descuelgan por los troncos—; las bromeliáceas —por ejemplo, los claveles del aire—; y el caraguatá. La selva misionera ocupa 27.000 km cuadrados de la provincia de Misiones y es el último tramo de la selva austrobasileña.
Realizar un sobrevuelo sobre este territorio permitirá comprobar su sistemática destrucción sin que nadie se muestre capaz de detenerla o de revertir el proceso; toda una tragedia si analizamos sus funciones ambientales:
1) Retener la humedad y regular la infiltración de agua en los suelos de una zona de grandes precipitaciones. 2) Aportar vapor de agua a la atmósfera, lo cual evita la desertificación. 3) Fijar los suelos, impidiendo la erosión de los perfiles superficiales. 4) Constituir el hábitat y refugio de la fauna silvestre. 5) Contener especies arbóreas muy valiosas y casi únicas. 6) Albergar un banco genético insustituible por la alta variedad de especies endémicas.
Más de 2.000 especies de flora y unas 400 de fauna poblaban la selva misionera. Cabria preguntarse si todavía estamos a tiempo de evitar su completa desaparición.

CLIMA

El clima de esta provincia es en general subtropical sin estación seca, pero existen algunas variantes como en la altiplanicie oriental, donde se registra un mayor enfriamiento por influencia de su latitud.

En verano, las temperaturas son elevadas durante todo el día, pero el invierno es benigno, lo que significa que no hay mayores diferencias entre las cuatro estaciones, hecho que se manifiesta en la migración de algunos animales.

Disminuyen de norte a sur por efecto de la latitud. La amplitud térmica diaria es pequeña como consecuencia de la gran humedad relativa que llega al 77%, predominando los vientos del nordeste, este y sudeste.

El rasgo más importante son las precipitaciones abundantes, regulares y casi constantes.
Oscilan de más de 1000 mm en el sudoeste hasta 1800 mm en el nordeste, con máximos en otoño y primavera, disminuyendo en verano e invierno, de norte a sur y de este a oeste por influencia de los vientos procedentes del Océano Atlántico.

La temperatura anual tiene un promedio de 21ºC.

La selva y los suelos rojizos, por alteración de las rocas en clima cálido y húmedo, son el rasgo característico del paisaje.

Clima